BRUIT ≤ es una nueva banda de cinemático y vanguardista post-rock, proveniente de Tolouse, Francia. En forma de cuarteto, sus componentes humanos vienen de haber concretado otros proyectos musicales, no afines al género en algunos casos, para llegar a este punto de conjugación de ideas y cosmovisiones que se conjugan en un poderoso y emotivo álbum llamado The Machine Is Burning And Now Everyone Knows It Could Happen Again; el primero de su historia.

Qué les podemos decir sobre la magnificencia de esta obra. Primero que nada, no esperen de ella un disco típico del post-rock, clásico o moderno, solo por el hecho de diversificar sus dinámicas silencio-ruido-explosión, ya que en estas composiciones destaca la complejidad instrumental así como su versatilidad tecnológica, acoplando distintos elementos electrónicos para alcanzar vigorosas cumbres emocionales que provoquen verdaderas catarsis. Pero los caminos que se construyen para llegar a ellas no siempre son los mismos, tampoco los paisajes que nos acompañan; por ende la experiencia puede ser tantas cosas menos predecible. Clímax tras clímax, sorpresa tras sorpresa hacen de la confusión una inevitable adicción auditiva, que nos sumerge en las tinieblas para descifrar el final de esta historia que sabemos, al menos, que no será apto para personas frágiles de sentimientos. Tonos acústicos, otros eléctricos, unos más industriales que sintéticos y luego reposos ambientales previos a la tempestad antes de seducirnos con ráfagas de música neoclásica; poco a poco vamos comprendiendo lo perdidos que estamos en este mundo antes de la perdición fatal.

Pensamos que los mejores álbumes con aquellos que te atrapan y no te sueltan… nunca. Esos que te inspiran a realizar acciones a tu alrededor, esos que estimulan tu actividad cerebral. Esos que te transportan tan lejos y cerca y los que nos pierden entre sus ondas sonoras. Si encima de ello su trama conceptual puede percibirse sin la necesidad de escuchar una sola línea lírica -como es el caso- algo realmente llega a impactar en nosotros. Imagínense que la preocupación de estos franceses por el rumbo de nuestra humanidad puede casi palparse en cada nota instrumental; pueden transmitir la angustia y el temor entre la melodía de su ruido, y afectar gradualmente los latidos del corazón en busca de respuestas en un laberinto de preguntas que no necesariamente necesitan respuestas.

Esta es la fuerza de BRUIT≤; es lo que hace de su debut discográfico uno tan especial, uno que recordaremos siempre cuando de títulos post-rockers se hable. Su música apasiona sacude conciencias. La carga política implícita en su arte así como la calidad de sus ejecuciones los emparenta inevitablemente con otros maestros de la clase, los canadienses Godspeed You! Black Emperor, quienes por cierto acaban de engendrar este año uno de los títulos más imprescindibles de esta label y de su catalogo. Bueno, tómenlo como amenaza o como mensaje de aliento: Godspeed, hoy podemos decirles que no están solos en esto.

 

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