Peter Matthew Bauer se imagina los últimos momentos de vida en el planeta Tierra, y piensa que un escenario distópico de esta magnitud debería sonorizarse con buena música de tonos sonoros púrupura, psicodélicos. Por eso creó el álbum Flowers, para sobrellevar el pánico colectivo con dulces melodías que nos invitan a observar por última vez las bellezas del mundo.

Este disco, el tercer en su repertorio, está repleto de instrumentación que se ejecuta de manera magistral, lo cual es aun más importante. Todo tipo de guitarras, arpas, sintetizadores, baterías de tintes orgánicos y luego programados, ruido atmosférico, bajos sólidos y cualquier otro aparetejo que se nos escape: todos suenan como si estuvieran vibrando bajo el agua. La voz doblada de Peter suena a veces hasta andrógina, y siempre colorida.

Creemos que les va a gustar:

 


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