Así como realizar las listas de cada año con los mejores discos, debuts y rolas tiene su lado placentero, también al final nos muestra su cara más triste: cuando dejamos fuera títulos que por más que intentamos colocarlos en alguna posición, no nos fue posible debido al cupo limitado. Esto no significa que no los disfrutamos igual o que no les damos su merecido reconocimiento, por eso sacamos siempre esta nota especial de complemento a aquellas listas y, quién sabe, a lo mejor con el tiempo y en la mente de diferentes melómanos, estas grabaciones pudieran incluso ser mejores.
¿Ustedes qué opinan? Acá vamos:
Los LPs
Alvvays, «Blue Rev»
Uno de los títulos que más nos dolió dejar fuera de nuestra lista definitiva de mejores álbumes, pero no podíamos pasar el año sin darle su merecido reconocimiento. Los canadienses se graduaron con este álbum, y bajo la producción de Shawn Everett le dieron nuevos matices y dimensiones a sus indie pop que pasa por momentos shoegazer, siempre con una pulcra instrumentación, perfectamente calculada; parece que poco a poco se están posicionando como una banda referente en este estilo musical. – más info
London Plane, «Bright Black»
Tirando de la luz y la oscuridad, estos canadienses se posan en un punto justo en donde convergen todo tipo de emociones diferenciadas, que juntas nos mantienen atados a sus pegadiza y bella cadencia que han logrado aquí. Esta es una de las nuevas bandas más finas del post-punk moderno; pero también les podemos pintar la etiqueta de indie pop, pues melódicamente registran una firma que de repente nos traslada a los spots más luminosos de este género, por más fugaz que esto sea. – más info
Al Lover, «Cosmic Joke»
Pongan atención y paren bien la oreja, porque el productor con sede en Los Ángeles, Al Lover regresó este año con una nueva y experimental ficha discográfica que los hará volar y enamorarse de toda creación galáctica, allá arriba en el cosmos. Para fans de la música electrónica y experimental, el trip hop, el dub y los giros caleidoscópicos en distintas velocidades, este es un álbum que los atrapará y seducirá de manera especial. – más info
The Spanish Amanda, «Magritte»
Con este LP nos queda una sensación agridulce; lo que pasa es que se publicó algo tarde en el año (hace apenas unas semanas), por lo que es probable que, de haberlo escudriñado más, se hubiera metido directo a nuestros 50 mejores. Sin embargo, fue tan bueno desde sus primeras escuchas que nos ha flechado sin tregua, sobre todo porque somos amantes de ese orgánico y refinado sonido indie pop en su versión jangle, ya saben, tipo Felt o The Field Mice. Y aquí estamos honrándolo. – más info
Plantamos, «Razones para Vivir»
Este es el primer larga duración de los mexicanos Plantamos, la nueva banda que formaron Alejandro Elizondo (Los Mundos) y su esposa, Bianca Villareal. Ella toca el violín, mellotrón, el órgano y además canta. Por su parte, él le entra a la guitarra, el bajo, maneja el sistema modular y ejecuta la batería, además de aportar con su voz también. Sientan pues, el furor del humo en sus canciones pop con pegadizas melodías, al más atinado estilo shoegazer de reverberaciones y ecos por debajo del fuzz. – más info
Catatonic Suns, «Saudade»
La banda norteamericana de psych-rock publicó este año su explosivo y alucinante disco de estudio, Suadade: una colección de 10 accidentes cósmicos con melodía. Algo acá nos recuerda a los primerísimos The Verve, cuando volaban sobre el space-rock y el shoegaze; pero esta banda forja su propia senda ascendente, encuentra su misión al saciarse del polvo de las estrellas entre estas detonaciones melódicas fuera de órbita. – más info
Placebo, «Never Let Me Go»
Fue muy placentero darnos cuenta de que este grupo, a pesar de los años transcurridos y las relativas intermitencias, no pierde el vigor de su sonido que lo ha hecho explotar en electricidad pura. En esta obra los ingleses se mostraron así otra vez y le subieron una rayita al volumen y a la intensidad de su arte. Cargaron las pilas en una euforia controlada, siempre con freno de mano al borde del precipicio. – más info
Crushinglove, «Technicolor»
Esta banda de Filipinas no lanzó uno, ni dos, ni tres sino cuatro espléndidos álbumes en este año. Los hubo de buenos a muy buenos, pero Technicolor fue nuestro favorito. Esto es pura miel de pop, del más azucarado e inteligente que resuena en temperaturas cálidas y bajo tonalidades orgánicas. Con siete tracks esta agrupación tuvo suficiente para enamorarnos rápidamente de su multifacética propuesta. – más info
High Vis, «Blending»
Hay algo en la voz de Graham Sayle y la instrumentación redonda de Martin MacNamara, Rob Hammeren, Rob Moss y Edward «Ski» Harper que hace sonar a este grupo como una mezcla de Jane’s Addiction con Close Lobsters, ¿no lo creen? Es más, me atrevería a suponer cierta influencia de The Smiths, y ya yendo más lejos también hay algo de afinidad por el movimiento mádchester. Esto londinenses además suenan contestatarios sin necesidad de incitar realmente a la violencia. – más info
Monocrhomatic Visions, «Reform»
El segundo y nuevo LP de Monochromatic Visions hace parecer a los ingleses no solo testigos sino también anfitriones de una fiesta en la que conviven en perfecta armonía el post-punk y la psicodelia en un club subterráneo de música shoegaze. Dicho lo anterior, no debe sorprendernos que las referencias de esta edición por Beso De Muerte Records nos acerquen a nombres diversos como Preoccupations, No Age y Crystal Stilts, como si todos convergieran en una misma paleta de colores y sentimientos. – más info
Secret Shame, «Autonomy»
Electrizante y combativo es el rock cargado de post-punk de Secret Shame, quienes beben del shoegaze y la irreverencia para dar forma a 11 tracks que noquean a primera escucha. Les va a hervir la sangre con esto, a pesar de que por momentos los de Carolina del Norte nos transportan a cuartos oscuros con las temperaturas bien bajas, donde rebotaran estas ondas sonoras que parecen cobrar forma sólida. Discazo bien poderoso el que tenemos aquí. – más info
Parking Dance, «Gloom Parasite»
Parking Dance es el nuevo proyecto musical que entreteje el pop, el dreampop y el post-punk en una sola pieza que se mueve frágil como el viento y oscura como una tarde en vísperas de la tormenta. El francés Matthieu Bonnécuelle es quien comanda el acto, y su primer elepé fue editado con Icy Cold Records. A través de loops, percusiones programadas y guitarras reverberadas es que se crean las palpitaciones melódicas de texturas que lucen sucias y luego se tornan ensoñadoras. – más info
The Reds, Pinks & Purples, «Summer at Land’s End»
En un año con tantos elepés, epés y singles que Glenn Donaldson y compañía lanzaron, algo teníamos que colar por acá, y nos complace que así sea pues al referirnos a Summer at Land’s End debemos decir que fue su mejor trabajo, o al menos uno de los mejores y más completos. Esto es indie pop bien hecho, igual de romántico que nostálgico y con intelecto de por medio. Qué hermosas baladas encontramos acá. – más info
Sacred Skin, «The Decline of Pleasure»
Tenemos nuevo estandarte del new wave, queridos y conocedores melómanos. No les exageramos. Verán, en este disco los ochentas palpitan con ganas y las máquinas de una elegante nave del tiempo prepara sus motores para iniciar el viaje de regreso, en el que escucharemos a todo volumen estos 11 himnos al amor y la añoranza. Esta es una obra altamente recomendada para fans de Tears for Fears y Erasure. Gran promesa. – más info
Los EPs
Iceblynk, «Iceblynk»
Fresco como la mañana y dulce como un caramelo es el sonido de Iceblynk, esta nueva banda neoyorquina que nos cautivó de inmediato con su primera producción discográfica: un EP sin título y con cinco canciones que nos dibujan una sonrisa en el rostro mientras las notas del más sofisticado y refinado dreampop de guitarras shoegazers transcurre. Atención con esa exquisita voz, un excelso timbre femenino que no se escucha todos los días en la escena indie. – más info
Memory Leak, «Confeti»
Una de las nuevas bandas mexicanas que más nos emocionan es Memory Leak. Desde el año pasado cada que sabemos por anticipado que van a realizar un estreno nos frotamos las manos, en espera de sofisticadas y pegadizas piezas. Con esta placa no hay decepción. Estos chicos saben bien manejar las emociones y las atmósferas de sus canciones que además cuentan con una instrumentación refinadísima que nos hace soñar despiertos. – más info
Nyx Division, «Dark Star»
Esta banda de Portland, Oregon nos mantuvo extasiados durante buena parte del año, desde que lanzaron su poderoso EP debut, Dark Star, que irremediablemente nos hizo pensar en una buena jerga entre Siouxsie and the Banshees y Savages, ¿no lo sienten igual? Este combativo post-punk tiene el potencial de incendiarlo todo al rededor, mientras la sensualidad, la estética y la energía se vuelven tópicos centrales en los temas de conversación de esta fiesta nocturna. – más info
NewDad, «Banshee»
En este tsunami irlandés que se apoderó de los primeros lugares en nuestras listas con la mejor música del año, no podían faltar los NewDad, quienes con Banshee se sumaron a esta avanzada verde que nos entregó buena y electrizante música alternativa. Esta placa de cinco canciones nos recuerda mucho a Juliana Hatfield en sus mejores días, ¿no creen? (en parte la voz de Julie Dawson tiene mucho que ver). – más info
Los Lucha, «Los Lucha»
Estamos seguros que un buen sector de nuestros lectores se hacen la misma pregunta que nosotros, de vez en cuando: ¿Cómo sonarían los Galaxie 500 actualmente? No sabemos si la respuesta más certera sería Los Lucha, pero sí que es la más factible. Esta banda escocesa es nueva en escena. Ya saben, de bajo perfil y no muy cercana de los reflectores, pero su amor por aquél trío estadounidense conformado por Dean Wareham, Naomi Yang y Damon Krukowski es más que obvio. Y nos encantan. – más info
Dead Leaf Echo, «Milk.Blue.Kisses.And.Whalebone.Wishes»
Este fue uno de los EPs -y producciones en general- más viajados y cinemáticos del año. La banda norteamericana, Dead Leaf Echo nos hizo soñar muy alto, por encima de firmamentos con vista a horizontes galácticos en los que lo irreal se apoderó de nuestra mente. Estamos hablando de una de las manifestaciones de shoegaze etéreo más bellas y teatrales del 2022, y eso que fue un gran año dentro de este género. – más info
The Killing Moon, «Strange Desolation»
No por ser fans de Echo and the Bunnymen (por el nombre, obvio) crean que van a sonar parecido. De hecho, este grupo de Rumania suenan más new wave pero desde una perspectiva gótica, como si trataran de remembrar a los primeros Depeche Mode, por ejemplo, con unas tonalidades muy ochenteras por momentos. La instrumentación tersa y el clima helado que rodean estas rolas dan ese toque final de misticismo a su fórmula. – más info
My Raining Stars, «The Life We Planned»
Thierry Haliniak tuvo un gran año con My Raining Stars, banda que regresó a la vida recientemente, después de muchos años en los que no grababa un disco completo. Entonces, el LP llegó pero con él también un EP como romántico complemento a uno de los registros de pop indie más sublimes que vamos a encontrar en la actualidad. Esta es una producción recomendada altamente para los melómanos que aman las guitarras jangle y de influencias shoegazers, la nostalgia y todo lo que huela y suene a noventas. Bueno, en realidad, todo lo que amamos acá en S&V. – más info
Los Singles
Bauhaus, «Drink the Wine»
Parece irreal todavía a estas alturas: tuvimos nuevo single de Bauhaus en pleno 2022. Y qué bien suena. Aunque pensándolo bien, después de tanta actividad sobre los escenarios en los años recientes, hoy parece natural que su próxima movida fuera grabar una rola. Todos se escuchan impecables: Daniel Ash, Peter Murphy, David J y Kevin Haskins… como los vinos.
Flynt Pop, «Time of My Life»
Flynt Pop es el proyecto encabezado por Martin Isenberg, quien conjuga el dreampop con el post-punk en planos semi industriales para crear atmósferas ensoñadoras, más oscuras que rosas. Este fue el año del debut de su primer EP y «Time of My Life» fue uno de los avances previos que nos flechó a primera escucha.
Izzy and the Black Trees, «Love’s in Crisis»
Uno de los singles más deslumbrantes del año lo tuvo esta banda polaca que evoca al caos pero en la mente de sus miembros se abren rincones reservados para la crítica social y política, así como la introspección. Patti Smith o Poly Styrene, y más recientemente Polly Jean Harvey se sentirían orgullosas de lo hecho acá. Este tema es tan solo una clara muestra de lo que este grupo es capaz.
Blushing, «The Fires»
Blushing editaron un track cargado de una atmosfera goth, un atiborrado noise etéreo y dulces voces femeninas que envuelven a la nostalgia en un ecosistema sonoro desolado. Su fuerza es obsesiva. La intensidad avanza constantemente y desprende un magnetismo apasionado dentro de una dualidad oscura con el brillo de luna llena en los meses de octubre. La lírica es alucinante, entre un vacío y el duelo de una promesa perdida.
Austin TV, «Hasta las Hifas, un Micelio»
Al principio casi nadie lo creía, pero el regreso de Austin TV fue uno de los actos más sorpresivos del año para todos sus fans mexicanos y latinoamericanos. En 10 años tuvieron mucho que pensar estos señores y seguros estamos que recientemente sacaron a flote todas las ideas sonoras que traían acumuladas en sus neuronas. Ahora que graban un nuevo disco de estudio, gracias a temas como este podemos saborear el nuevo post-rock que está en camino.
Mueran Humanos, «El Camino del Dolor»
Para no variar, los argentinos crearon otra onírica pieza en la que Carmen Burguess nos vuelve a embelesar con su natural canto y sus melancólicas letras. Nos encantaría que este fuera el primer escalón hacia el siguiente nivel musical para su próximo álbum. Si lo que se viene suena así, considérenlo desde ya un exitazo.
The Primitives, «Don’t Know Where to Start»
Argumentando con su inconfundible indie-pop/alt-rock emparentado con la década de los noventas, The Primitives reaparecieron en escena y nos pusieron a bailar a todos sus fans. Esta canción contagia luz y alegría, y nos para en un optimista spot esperando por cosas brillantes por parte de los ingleses.
The Church, «The Hypnogogue»
Steve Kilbey no descansa. Entre sus múltiples proyectos -incluso entre haber lanzado un álbum con Martin Kennedy- este año tuvo tiempo pare reunir a sus compañeros en The Church no solo para girar por el mundo sino también para grabar nueva música. Escuchando lo que soltaron en «The Hypnogogue» solo podemos augurar un álbum igual de hipnótico y sofisticado para el próximo año. Tenemos fe.
Close to Modern, «La Hacienda»
Ah, bocanada de aire fresco y 10 mil voltios de buena vibra con los que nos cargan de buena vibra los Close to Modern, esta nueva banda de post-punk revival que nos recuerda que la música es la mejor medicina para cualquier corazón, por más golpeado o gastado que se encuentre. Piensen en Laddermen, Human Tetris y Editors para obtener una pizca de la fórmula musical que manejan estos chicos de Las Vegas.
Trementina, «I Can Show You Wonders»
Chile estuvo presente en el mejor shoegaze del año con el fantástico regreso de Trementina y su galvánico single «I Can Show You Wonders»: puro pop con ruido que penetró directo en nuestros tímpanos. Lejos de aturdirnos, nos dejó como adictos en los más altos decibeles. Queremos más de esto.
Castlebeat, «Spill»
Todo un himno para el otoño musical que llevas dentro; Josh Hwang ya lleva unos años rondando en la blogósfera y su misión es generar estados vulnerables en quien escuche su romántico pop de recámara. Darle play a «Spill» es como mirar en cámara lenta la formación de una gran bola de sueños que va a rodar frente a nosotros.
Neptuna, «Vorágine»
Mezclando el dreampop y la psicodelia en un mismo estado de trance musical: así es como resuena «Vorágine» en nuestra piel. La banda mexicana, Neptuna ha grabado una de las mejores guitarras del año y ha engendrado una teatral pieza que nos va envolviendo progresivamente en un halo de emociones intensas. Temazo.
CATEGORÍAS
