La banda estadounidense normalmente relacionada con la escena indie-garage rock, Black Lips han lanzado una experimentación sonora que recibió el título Apocalypse Love, un álbum de 13 rolas en las que ciertamente bajan revoluciones y decibeles, pero incursionan en rubros no explorados por ellos anteriormente, logrando además una fusión impecable en un tracklist que se pasa volando.
Lejos de caer en un desastre, estos veteranos del rock le entraron hasta al pop, ya ni hablar del post-punk, el blues, country y hasta un poco de funk, todo con labia que los incorpora en las conversaciones reflexivas y joviales rumbo al amor y sus desencantos, explorando de esta manera territorios en los que se les percibe mucho potencial. El baile y el polvo forman una mancuerna ideal para dejar salir las energías por los poros de la piel que mientras la van mudando camaleónicamente de un track a otro.
Ya sea para pisar el acelerador en un viaje alocado sobre cuatro ruedas, para ir más despacio contemplando los paisajes desérticos a través de las ventanas, o bien para anticipar la mejor fiesta nocturna de tu vida esta producción funciona aun en sus interludios ligeros de baladas que te otorgan un poco de descanso. Gruñidos eléctricos, bases electrónicas clásicas, pianos cristalinos y voces rebeldes nos empujan hacia los saltos de fe de una banda que se siente libre, empoderada y confiada. Más madura que nunca también. Todo suena como si algo se estuviera cocinando a fuego lento, y mientras tanto las brasas tocan la existencia y encienden el ambiente que se mantiene cálido.
Como de ese tipo de bandas que son bien difíciles de etiquetar, Black Lips suenan extraordinarios y poco ortodoxos en Apocalypse Love, este disco que va de lo primitivo y orgánico hasta lo salvaje y procesado. No diremos que hay un «equilibrio» como tal, sino que más bien a cada extremo que se mueven se autocontrolan a la perfección. De un tramo del set a otro parece que estamos en campos totalmente diferentes o quizá con una alineación de músicos distinta a la habitual, podría decirse, pero lo más asombroso es que no sabes en cuál mood quedarte porque cada giro se vuelve mejor que el anterior, y todos te mantienen atados a una propuesta que no es apta para quienes amen lo homogéneo.
TRACKLIST:
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No Rave
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Love Has Won
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Stolen Valor
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Lost Angel
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Whips of Holly
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Apocalypse Love
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Operation Angela
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Crying On A Plane
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Sharing My Cream
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Among the Dunes
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Tongue Tied
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Antiaris Toxicaria
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The Concubine
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