Las rupturas del rock… pero también del pop, del indie, el britpop, shoegaze, dreampop, punk y otros géneros aderezados que se nos crucen en esta lista de bandas que de la cima pasaron al colapso. Discordias, ambiciones, falta de comunicación, diferencias creativas, celos y rivalidades, e incluso problemas personales de índole sentimental han sido las causas más comunes de las diferencias que no pudieron revolverse en su momento.

Es una pena que en todos estos casos las cosas no hayan tomado un rumbo distinto y muchas bandas legendarias terminaron por desintegrarse de manera controversial, unas incluso en puntos de su carrera en los que todavía tenían muchísimo que ofrecer. Algunas tuvieron sus segundos capítulos muchos años después y concretaron reuniones exitosas, pero en otras las heridas jamás sanaron y el distanciamiento ha sido para siempre.

 

Oasis

Empezamos con uno de los casos más polémicos y mediáticos: los hermanos Noel y Liam Gallagher. Prácticamente desde que se formó la banda sus conflictos personales y creativos han estado presentes y bien documentados con sus constantes incidentes públicos, hasta que todo tronó en 2009 y por 15 años no se volvieron a dirigir la palabra (solo de manera indirecta en redes sociales para burlarse del otro o atacarlo). Hubo muchos intentos de reconciliación pero todos tuvieron respuesta negativa por uno o el otro, aunque los coqueteos siempre estuvieron presentes. Fue hasta este 2024 que, por fin, anunciaron su regreso a los escenarios.

 

The Smiths

Otros que parecen que tuvieron y siguen teniendo diferencias irreconciliables son Morrissey y Johnny Marr, fundadores de The Smiths que mantuvieron una relación complicada durante muy buena parte de la trayectoria de la agrupación. Aunque su mancuerna creativa era perfecta, sus visiones artísticas empezaron a chocar, así como sus personalidades, a tal punto que las tensiones llevaron a su separación en 1987, acompañada de declaraciones públicas en las que ambos expresan sus frustraciones y descontentos con el otro. Esto no ha cesado en todo este tiempo, aun con sus respectivas carreras como solistas (y en el caso de Marr con otras bandas también), aunque es un tema que ya no está en las primeras planas de ningún periódico.

 

Sonic Youth

La ruptura de una de las mejores bandas del rock alternativo en la historia tiene que ver con una infidelidad entre sus miembros. Después de 27 años de matrimonio estable, Kim Gordon y Thurston Moore anunciaron su separación en 2011 sin dar mayores explicaciones, pero se sabía de antemano que eran diferencias muy fuertes pues como consecuencia inmediata la banda también llegó a su fin. Años más tarde, Kim reveló que le habían puesto el cuerno, versión que Thurston reconoció e incluso le puso nombre a su infidelidad: Eva Printz, editora de libros de arte con quien siguió manteniendo su relación amorosa.

 

Guns N’ Roses

La desintegración de Guns N’ Roses fue un proceso que se dio paulatinamente. Primero con el despido de Steven Adler por su adicción a las drogas, uno años años más tarde con la salida de Gilby Clarke alegando cansancio y diferencias con sus compañeros, y en 1996, Axl Rose corrió a Slash no sin antes describirlo como un «cáncer» para la banda, aunque muchos alrededor coincidirían que en aquellos días era el propio Axl quien se había vuelto insoportable y tomaba como rehén al grupo en su lucha por quedarse con los derechos del nombre.

Como sea, fueron más de 20 años de separación, hasta que Slash y Axl se reconciliaron y anunciaron su regreso a los escenarios (y de vez en cuando a los estudios para grabar algo).

 

Van Halen

Acá prácticamente fue un todos contra todos, situación problemática que iba dándose en diferentes épocas y circunstancias. En los 80’s iniciaron los conflictos personales entre Eddie Van Halen y David Lee Roth, teniendo como resultado la salida del segundo. Cuando llegó Sammy Hagar en su lugar las cosas parecían marchar bien al principio, pero también ocurrieron problemas que lo obligaron a marcharse. Y cuando en 2007 David regresó para emprender una exitosa gira con la banda, no pasó mucho para que otra vez se pelearan. Y así pasaron los años inestables y con periodos largos de inactividad, hasta que ocurrió el lamentable fallecimiento de Eddie en 2020, lo que puso punto final a esta historia.

 

Caifanes

Lo de Caifanes es uno de los casos muy bien conocidos también. Poco hay que agregar sobre los pleitos entre Saúl Hernández y Alejandro Marcovich, mismos que se iban haciendo cada vez más evidentes hasta ventilarse en las entrevistas en televisión o en la prensa escrita, a tal punto de llegar a confrontarse en los programas, con Alejandro afirmando que lo único que los dos tenían en común era el esqueleto. Como era de esperarse, llegó la ruptura de la banda en 1995, aunque debemos recordar que antes de eso Sabo Romo y Diego Herrera también se habían marchado alegando problemas internos, además de mostrar intenciones de emprender otros proyectos.

Muchas veces el grupo se ha reunido en los escenarios con Saúl y Alejandro lado a lado (hasta abrazándose y besándose fraternalmente), pero no pasa mucho para que las cosas se pongan tensas otra vez. Diego regresó, mientras que Sabo va y viene. Y así, uno de los grupos más importantes en la historia del rock mexicano, la ha estado librando en los últimos años.

 

The Jesus and Mary Chain

Si creían que los Gallagher eran los únicos hermanos conflictivos, acá les contamos brevemente la historia de Jim y William Reid que también tuvieron sus diferencias, tan serias que llevaron a romper a The Jesus and Mary Chain y mantenerla inactiva por casi 20 años. Todo se vino abajo por allá del ’98, después del disco Munki y mientras Jim lidiada con sus problemas de alcohol; hay testigos que dicen que, de no ser por otras personas presentes, los hermanos habrían llegado a los golpes en los camerinos. De hecho, arriba de los escenarios sí llegó a pasar y fue la última vez que se vio a los Reid haciendo música juntos… hasta el 2017 que se hicieron cuates otra vez para grabar el disco Damage and Joy.

 

Pink Floyd

Este es otro de los grupos legendarios que tuvieron que afrontar las consecuencias de los enfrentamientos entre sus dos principales mentes creativas: Roger Waters y David Gilmour. Fue a mediados de los ochentas que Waters decidió abandonar la alineación y lo que vino después fue una disputa legal sobre el uso del nombre de la banda. Por su parte, Gilmour lo acusó de hacer esa movida para acelerar el fin de Pink Floyd, una declaración que algunos pensaron había hecho para volcar a los fans en su contra. Se pudieron reunir en 2005, sacaron su show adelante pero para un año después estos dos se volvieron a dar la espalda.

 

Cocteau Twins

Queda claro que la separación de Cocteau Twins a finales de los noventas tuvo que ver por lo difícil que era la convivencia entre Elizabeth Fraser y Robin Guthrie tras su rompimiento sentimental. Se sabe que fueron muchas cosas las que ocurrían, desde las adicciones de Robin hasta una especie de catarsis emocional de Liz debido a cosas que venía arrastrando desde su niñez, pasando por la fatiga de Simon Raymonde que tenía que meterse en medio de los dos para tratar de sacar las sesiones adelante. Por más que intentaron con dinámicas distintas (grabar cada quien por separado) e incluir nuevos músicos para sus presentaciones en vivo, la banda no pudo más.

Muchos fans soñaron despiertos cuando se anunció oficialmente se reunión en el festival Coachella en 2005, pero unos días antes cancelaron (se dijo que por petición de Liz). Muchos años después, Simon ofreció una entrevista a Stereogum en la que dijo que «el dinero no importa», sentenciando que la banda nunca jamás volverá a reunirse.

 

The Libertines

La fama llegó muy pronto en la carrera de The Libertines, al igual que las adicciones, los excesos y las malas prácticas. Y es que poco después del bombazo del primer disco del grupo, Pete Doherty comenzó a robar dinero y equipo de mucho valor a su compañero Carl Barat. Esto ocurría incluso mientras la banda estaba concentrada y de gira, lo cual desató diversas riñas que fueron degradando el ambiente al interior. Pete fue preso un tiempo y lo curioso es que después de salir se juntó con sus compañeros a grabar música en el estudio, ah, pero eso sí, con un guardaespaldas que el manager había contratado en caso de que las cosas se pusieran violentas. No pasó mucho tiempo para que, después de lanzar su segundo elepé y de una gira -en la que Doherty se encontraba ausente en muchas ocasiones- el grupo se separara por casi 10 años.

 

Héroes del Silencio

Después del disco Avalancha, estos chicos decidieron dejar de ser héroes hasta el 2007, año en que se reunieron por tiempo limitado, realizando una gira de despedida para no volverse a ver las caras nunca más. En todo ese intervalo de tiempo casi todos los integrantes desprendieron proyectos alternos, siendo la carrera solista de Enrique Búnbury lo más sonado, y en su primer trabajo (Radical Sonora) se pudo entender parte de las confrontaciones que existían en la banda. Mucho después, en el documental Héroes, Silencio y Rock & Roll se confirmó que él y Juan Valdivia no se ponían de acuerdo en la dirección musical que debían seguir juntos para finales de los noventas. Búnbury quería desprenderse de las guitarras y experimentar en la música electrónica, ante lo que Valdivia y el resto de sus compañeros pensaban que estaba delirando, lo que llevó a que estas diferencias se intensificaran y, junto a la lucha de egos, decidieran romper de una vez por todas.

 

Sex Pistols

Cuando llegó la última gira de Sex Pistols en 1978 ya casi todos sabían que sus integrantes se la vivían peleando un día sí y el otro también. De hecho, las tensiones más fuertes pasaban entre Johnny Rotten y el manager de la agrupación, Malcolm McLaren. Las cosas se ponían cada vez más turbulentas entre las drogas, el alcohol, las nuevas visiones y las gestiones administrativas. Rotten pensaba que Paul Cook y Steve Jones se unían con Malcolm en su contra y, encima de todo eso, Sid Vicious tenía serios problemas de salud y adicciones, por lo que lo veía como una carga o, como él mismo lo describió: «un desperdicio de espacio». Con esta combinación de factores no tenía caso seguir juntos, por lo que después de terminar su último show con aquella mítica frase «¿Habían sentido alguna vez que los han estafado?», cada uno de los miembros volvió a casa por separado. ​

 

The Police

Esta banda británica tuvo una ruptura silenciosa y, digamos, en «buenos términos», aunque esto no quiere decir que terminaron como los mejores amigos del mundo. Las luchas internas y los egos confrontados fue también constante en su corta trayectoria, aunado a que, como ellos mismos decían, los integrantes no tenían nada en común fuera de su gusto por la música. Después de una gira en el ’84, Sting no aguantó más la convivencia con Stewart Copeland, y una cosa llevó a la otra para que los tres integrantes se empaparan de conflictos y decidieran concluir su travesía como agrupación.

 

The Beatles

En los casos más lamentables está, desde luego, el de The Beatles. Los de Liverpool se separaron en 1970 después de alcanzar la luna y las estrellas en una década muy exitosa para ellos. Todo ocurrió por una serie de factores interrelacionados como los constantes encuentros entre John Lennon y Paul McCartney por sus diferencias creativas y personales, el deterioro en la cohesión del grupo tras la muerte de su manager Brian Epstein (1967) y las tentaciones de distintos proyectos individuales, así como los desacuerdos por los manejos financieros y el proceso de selección de su nuevo representante. A final de cuentas, y por más duro que suene, la decisión que tomaron fue la mejor.