El amor, la melancolía y el optimismo también se entrelazan en el viento, ese que acompaña las ondas sonoras de tersa resonancia y con una cadencia especial en este estilo musical.
La nostalgia y la elegancia de SPECTRES relucen en su nuevo disco de larga duración, Presence, un trabajo con el que se inclinan más al pop (y britpop, quizás) sin dejar de presumir orgullosamente sus raíces post-punk, esas de origen ochentero y que alcanzan su madurez en los noventas. El sonido de estos chicos canadienses es cálido y accesible, de instrumentación refinada y un cuidado minucioso en los pequeños detalles sonoros.
Imaginen a The Railway Children y Death Bells en un día de campo durante el atardecer. Rolas como «The Old Regime» y «Justice and Cross» suenan clásicas y románticas con un estilo sobrio pero también súper melódico, funcionando como anclas perfectas en la primera parte del tracklist, ya saben, para no soltar a los que escuchan por primera vez. Luego, «Real World» con su suave toque sintético nos hace deslizarnos hasta una zona de confort relajante, justo antes de la llegada de «Waiting» que cuenta con una fórmula muy post-punk revival que me recuerda mucho a Human Tetris, por cierto.
Ya en la segunda mitad de la producción, «Chain Reaction» sube las revoluciones y agita las aguas con una vena punk que apenas se asoma en un cuarto semi oscuro, para que inmediatamente después aparezca «Falling Down» que tiene una suerte pop muy del estilo de The Ocean Blue, al menos en su intro, pero que rápidamente adquiere la propia marca de los espectros de Toronto. Al final, llega una rola que paradójicamente tiene el título «Star Again» y que suena más electrizante que buena parte del resto del álbum, cerrando el disco con fuerza y con un poco de más punch.
Creo que SPECTRES encuentran un equilibrio perfecto en Presence: sus ambiciones pop se entretejieron casi de manera natural con los fundamentos post-punk que los motivaron a crear arte. El amor, la melancolía y el optimismo también se entrelazan en el viento, ese que acompaña las ondas sonoras de tersa resonancia y con una cadencia especial en este estilo musical. Además Brian Gustavson se confirma como una de las voces más exquisitas de la actual escena, con un timbre que pasa por toda esa ola britpopera noventera y que parece robarse trucos de Morrissey (The Smiths) y David Schelzel (The Ocean Blue).
TRACKLIST:
Presence
The Old Regime
AM Gold
Justice and the Cross
Real World
Waiting
Dominion
One Day
Chain Reaction
Falling Down
Start Again
Me suena a:
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