Dry Cleaning están viviendo un gran momento de su carrera, justo al inicio de sus andadas. Si bien ya llevan varios años haciendo música que los aleja drásticamente del rock usual, fue en 2021 que apenas lanzaron su primer disco de larga duración, New Long Leg, que se metió bien colocado en nuestras listas de los mejores álbumes y debuts del año. Y ahora regresaron, o mejor dicho continúan su senda con la producción sucesora: Stompwork.
Te diré algo que te ahorrará mucho tiempo antes de continuar con esta crítica: si no te gustó aquél primer disco, no hay nada que buscar acá; pero si igual que nosotros quedaste fascinado con ese estilo tan original y peculiar de la banda londinense, acá vas a sentir lo mismo pero con nuevos matices, como en una experiencia más revolucionada. Y es que en este set de 11 canciones el cuarteto se siente más suelto, más confiado (algo que adquirieron después de tantas alabanzas en meses pasados). Luego, las letras son mucho más inteligentes y al mismo tiempo divertidas (hay unas que hablan sobre la admiración hacia las nutrias, por ejemplo), destacadas y sobrias que se conjugan muy bien con el soberbio estilo de canto de Florence Shaw que, ya sabes, nos platica, nos susurra y a veces hasta medio quiere cantarnos sus historias.
Instrumentalmente, la arritmia y la disonancia de muchas de estas piezas hacen de las suyas, es decir, juegan como cómplices del mismo bando, con el fin de acorralarnos y no dejarnos salida ante la confusión, sin quedarnos más remedio que quedarnos dentro de dilema sonoro que pide a gritos ser descifrado. Ahí dentro encontraremos unas jugosas y puntiagudas cuerdas eléctricas que pasan por sonidos orientales y el jangle-pop, unos teclados estilo vintage y que hacen de timbre atmosférico detrás de toda la avanzada, y hasta unos trucos psicodélicos y de bossanova que acompañan las armonías que a todas luces fusionan nuevos géneros de una manera tan sutil que pasan desapercibidos, lo que indica que se utilizan de manera muy fina.
Como bien deducen, el sonido de los ingleses se está expandiendo de manera muy interesante, y lo mejor es que el espectro de música sigue siendo el mismo.
Con Stumpwork, los Dry Cleaning dan un paso al frente, no gigantesco pero sí muy importante. Su registro es algo (mucho) más que rock alternativo, está en una línea al costado del post-punk, como flotando encima del indie-rock y a espaldas del punk. Con su obra entramos a una especie de limbo en el que la música fluye por sí sola. Estamos frente a una de las bandas más soberbias y originales de los años recientes. Punto.
TRACKLIST:
Anna Calls from the Arctic
Kwenchy Kups
Gary Ashby
Driver’s Story
Hot Penny Day
Stumpwork
No Decent Shoes for Rain
Don’t Press Me
Conservative Hell
Liberty Log
Icebergs
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