Reptile Music

2022


Si de por sí en sus inicios -y me atreveré a decir «primera etapa»- Resplandor nos hacía sufrir a los fans cuando tenía prolongados lapsos de tiempo entre un LP y otro, imagínense ahora lo que fue este hiato de 14 años desde Pleamar (2008) a su nuevo y recién estrenado álbum de larga duración: Tristeza. Los peruanos nos habían acostumbrado a los interludios de silencio pero nunca antes tan largos, y en una escena tan ferviente como la shoegazer en las últimas décadas, exponentes de este nivel son necesarios y por su regreso los oyentes del ruido etéreo estamos agradecidos.

Nuevamente apelando a los dotes de eminencias del dreampop para las tareas de producción y masterización, como Robin Guthrie (Cocteau Twins, Violet Indiana) y Simon Scott (Slowdive), el proyecto comandado por Antonio Zelada (quien compuso todas las rolas) vuelve a encontrarse con su húmedo y celestial sonido, retomando las cosas justo donde las dejó hace años y dando el siguiente paso natural para seguir escribiendo su historia. En ese sentido, este disco traza un puente de unión natural con sus previos trabajos, al mismo tiempo que inaugura una segunda etapa para Resplandor, un nuevo respiro en sus gélidas atmósferas.

Canciones como la inaugural «Blue» y la que sigue, «Rêverie» (en la que Guthrie también toca el bajo) son piezas volátiles que izan banderas que anuncian el encuentro de la nostalgia con la ilusión, ondeándose en horizontes mágicos en mundos surrealistas. En la segunda de ellas, que de no ser por los angelicales coros de Tatiana Balaburkina al fondo podría pasar por una rola instrumental, me recuerda mucho a «Twilight» (de Pleamar) en su estilo cinemático, aunque melódica y sentimentalmente transmite cosas distintas. Más adelante, en «Adore» (que ya habíamos conocido desde el año pasado) los sueños y la esperanza se mojan de reverb y presentan un emotivo estribillo que no solo se mete en tu mente sino que también remueve algunas texturas de tu corazón, por más arrugado que este pueda estar.

Considerando que este es un tracklist de solo siete piezas (pero muchas de ellas con larga duración), podemos decir que aquí culmina la primera mitad del álbum. Entonces «Oceáno» es un «recomienzo» para cambiarnos el chip hacia un estado emocional más vulnerable, bajando revoluciones además. Por eso esta construcción teatral -también casi instrumental- se vale de trucos técnicos del post-rock sin renunciar a los elementos sonoros del shoegaze, apuntando con navajas cristalinas a los sentimientos más melancólicos para despertarlos y hacerlos vibrar en nuestro interior. Y así se marca uno de los momentos más profundos de la producción.

Rolas como «Feel» en su estado más electrónico nos toman de la mano para avanzar en los campos brumosos del dreampop, con bajas temperaturas afectando la piel y cascadas elevadas que se dibujan alrededor del paisaje. Sí, parece una canción para caminar seguros por más enigmática que la senda nos parezca y a pesar de esa parada que tenemos que hacer en la que se prepara la antesala para la última estación, «Silencio», canción con la que nos despedimos y que en esencia resume todos los fundamentos resonantes que han caracterizado la fórmula de esta banda en toda su trayectoria. Siempre con el frío viento a favor. Siempre triunfantes.

Con Tristeza, Resplandor ha engendrado un álbum fantástico, de ensueño. Cada track es una llave majestuosa de puertas hacia irreales mundos y sus hermosas melodías nos invitan a imaginarnos lo inmaterial que puede llegar a ser la existencia en ellos. Bajo torrentes sonoros y picos de hielo erosionándose en espirales etéreas, nos elevamos hacia una mejor perspectiva de esos horizontes acuosos mientras las emociones están a flor de piel. Además, lograron reconectar sus obras, generaron el vínculo como hilo conductor para demostrarnos que nunca lo rompieron, que nunca realmente «se fueron», sino que simplemente estaban esperando que su manantial de inspiración se reactivara para continuar la travesía que una vez iniciaron. Y tan solo pensar hacia dónde nos llevará la próxima escala es emocionante.

 

TRACKLIST:
  1. Blue
  2. Rêverie
  3. Tristeza 
  4. Adore
  5. Oceáno
  6. Feel
  7. Silencio

 

Me suena a:

Slowdive

Deserta

Whimsical