Estrenándose un nuevo álbum de Cloud Nothins (Cleveland, Ohio) sólo reafirma y rectifica una cosa: el indie rock todavía posee grandes cualidades y elementos ocultos para explorar y detonar. Guitarras chirriantes, gritos melancólicos, instrumentos multifacéticos e intromisiones en las cadencias más cotidianas hacen de este género un deleite para quienes estamos acostumbrados a una música enternecedora, pero poderosa. Así es The Shadow I Remember, el nuevo álbum de la banda estadounidense que, desde hace varios meses, prometía ser uno de los grandes éxitos del género indie y que lo logra desde una base musical precisa, encantadora y natural.
Estrenado a finales de febrero y grabado por Steve Albini en Electrical Audio Studio de Chicago, Illinois, este LP encuentra su camino a partir de varias perspectivas y mutaciones sonoras donde la calidez y la dulzura se contraponen a la impotencia y al desgarro. Ya habíamos tenido un puñado de sencillos que auguraban la propuesta estilística de la banda, «Nothing Without You, The Spirit Of» y «Am I Something», sin embargo tener el álbum completo lo convierte en un trip mucho más fascinante y devastador, con lo justo para motivarnos o desfallecernos en momentos de caos y pesadumbre indie.
Ya desde sus primeros álbumes, destacando los increíbles Turning On (2010), el homónimo Cloud Nothings (2011) y Attack On Memory (2012), Cloud Nothings ha destacado por ser una banda intuitiva, fresca y dada a la no repetición de sus artífices sonoros. A través de un sonido que toca diferentes panoramas del indie rock, el emo o el punk, los de Ohio han sabido conjugar sus experimentaciones musicales y conseguir un sonido diverso y entusiasmado que hable por sí mismo. Ahora, The Shadow I Remember adquiere nuevas cualidades que lo hacen un viaje hacia el desorden, el dinamismo y la furia más condensada.
Compuesto de once canciones, el álbum renueva la ya de por sí interesante estética del grupo. Once años han servido para que atraviese por diversas etapas de composición artística que van desde el rock más “under” hasta un punk vehemente y rodeado de oscilaciones y desconciertos. Guiándose de conceptos como la tortura de la existencia, el castigo autoimpuesto y las relaciones intrapersonales, este se percibe como un trabajo que retuerce y compacta lo mejor de estos géneros para proyectar un aura de movimiento y acción propia, permitiendo que instrumentos como el bajo, la guitarra, el sintetizador y la batería ataquen o se desvanezcan para demostrar su propia decadencia o confusión mediática.
Utilizan además par de recursos que estructuran este nuevo disco en horizontes punzantes y piezas frenéticas. Alcanzan por momentos un escenario totalmente punk que opera desde la acidez, la ráfaga y la saturación, mientras que en otros se percibe mucho más arraigado al indie rock con pequeños destellos de desolación e intensidad furtiva que rayan en la melancolía o la inmersión. A pesar de estar compuesto por “dos partes”, la producción logra transformarse en una obra íntima y complaciente, destinada a subir o bajar de ritmo según sus propios ingredientes y a desarrollar un camino agradable y heterogéneo que se bifurca en la tensión de cada rola.
Este LP también podría conceptualizarse a través de su portada: un punto de observación inquieto que permite reencontrarnos con distorsiones sutiles, voces emocionantes-dramáticas y ritmos turbios que dominan la genialidad de este trabajo. Sin dudarlo, The Shadow I Remember actúa como un catalizador impresionante y bien ejecutado para Cloud Nothings en esta búsqueda de reformular y dominar sus géneros. Bajones emocionales, aceleraciones repentinas, acompañamientos lisérgicos y descensos apoteósicos nos enganchan desde la primera reproducción y demuestran cómo actúan desde una perspectiva renovada, ingeniosa y repleta de una vibra incandescente difícil de igualar.
Tracklist:
- Oslo
- Nothing Without You
- The Spirit Of
- Only Light
- Nara
- Open Rain
- Sound Of Alarm
- Am I Something
- It’s Love
- A Longer Moon
- The Room It Was
Me suena a: Wavves, Yuck, Buzzcocks
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