La espera de un nuevo disco de Deftones siempre es un enigma. Así pasa regularmente con esas bandas que no suenan a nada ni a nadie similar, que han conseguido labrarse un estilo propio muy definido y, por consecuencia, no hay puntos de referencia para anticiparnos a decodificar su sonido. A esto hay que agregar que Chino Moreno y compañía siempre tratan de crear discos muy diferentes entre sí. Y con Koi No Yokan no fue la excepción.
Es un álbum menos agresivo y menos potente en estructura que su antecesor (Diamond Eyes), pero sí es más ruidoso y con atmósferas más densas. Es decir, tiene ese balance perfecto entre intensidad y poderío sin caer en el desborde ni la saturación.
Este “equilibrio”, por llamarlo de alguna manera, podemos encontrarlo claramente en tracks como “Romantic Dreams”, “Poltergeist” o “Tempest”; con momentos sublimes en medio del caos de un ruido contundente. Incluso la inicial “Swerve City” tiene un mood muy a-la White Pony (su primogénito) con un disimulado toque psicodélico y otro tanto experimental que se proyectan aun más en temas como “Graphic Nature” y “Goon Squad”, por ejemplo.
Un quiebre importante sucede en “Entombed”, que podríamos definir como la balada del álbum. Un tema que a pesar de su aparente fragilidad, trae consigo esa coraza sólida característica de la banda, que resulta de la composición de elementos electrónicos sosteniéndose por guitarras inteligentes y baterías adictivas, que embonan con la ruda pero sensible voz de Moreno. Casi exactamente lo mismo pasa con “Rosemary”, aunque esta última se vuelve un poco más dramática y cinemática.
Y entonces concluimos la producción con un sentimiento similar al que nos dejó cualquier otro trabajo de los oriundos de Sacramento: escuchando algo nuevo, fresco, con su esencia personal, y en este caso específico con una astuta mezcla entre viejas fórmulas ya probadas en el pasado y nuevas técnicas que irán perfeccionándose en el futuro.
Con el Koi No Yokan los Deftones no pretendían crear el mejor disco del año, ni el mejor dentro de todo su catálogo. No esta vez. Lo que Moreno y compañía pretendían, era sentar uno de los principales puntos de partida para lo que puede llegar a ser el rostro del nuevo metal de la década. Si lo han logrado, entonces este es un título que no será reconocido como se merece ni hoy ni mañana, sino en los próximos años con las futuras generaciones cuando éstas miren hacia atrás en busca de influencias e inspiraciones.
Tracklist:
1. Swerve City
2. Romantic Dreams
3. Leathers
4. Poltergeist
5. Entombed
6. Graphic Nature
7. Tempest
8. Gauze
9. Rosemary
10. Goon Squad
11. What Happened to You?
Me suena a: Marilyn Manson, Serj Tankian, Nothingface
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