Evan Scott Sharfe y Chase Anderson no tenían una tarea sencilla al secundar su primer gran disco de larga duración, Gone (2013). Aquella producción fue al oído como un diamante a la vista para los melómanos ávidos de la mezcla más refinada de pop sintético con la electrónica en el goth; una propuesta esencialmente deudora de Clan of Xymox.
Ahora, con Wake que llega cuatro años después las cosas no han cambiado mucho en cuanto a sonido se refiere. Pero en tempo el asunto de vuelve más vibrante. Y no es que anteriormente no hayan ejercido danzas en los cementerios como pistas de baile, pero sí encontrábamos episodios de reflexión y melancolía en baladas más profundas y serenas. Acá no. De hecho tenemos a unos Skeleton Hands pisando más el acelerador y creando ráfagas de synth-goth que resuenan en un ambiente limpio, con una resonancia siempre nítida.
Estas son 10 canciones mucho más sencillas que forman un álbum más, digamos, plano, sin picos de intensidad ni una marcada bipolaridad emotiva. Hay algo de esas guitarras que parecen ya patentar un sonido súper distintivo en ellos; algo así como un eco a lo Disintegration (The Cure) pero con un timbre más agudo y su filo más pronunciado; y ejecutado además con más prudencia.
Es un hecho que Wake nos puede quitar el sueño en noches frías y largas, pero se pasa volando a ritmos apresurados. También encontraríamos calor en ella si dejamos que el cuerpo se deje llevar por los ritmos, con los ojos cerrados y el humo del tabaco rodeando las siluetas que se iluminan bajo la luna llena. Skeleton Hands no da un paso atrás respecto a su anterior entrega discográfica. Tampoco avanzó. Se quiso posar un tiempo más en ese spot creativo que los mantiene ocupados conversando con los espíritus de la noche.
Tracklist:
- Wake
- Unwanted
- Gardens
- Shadows
- Requiem
- New Clear Dawn
- Misanthropology
- Careless
- Procession
- Awake
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Me suena a: Clan of Xymox, Azar Swan, Drab Majesty
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