Hablemos de Past Day, un nuevo acto en Rusia de fusión instrumental de guitarras nostálgicas y etéreas, energía post-punk y bases electrónicas, y una atmósfera lúgubre que viste la melancolía de elegancia.
Inspirado en bandas como New Order, Kino y The Cure, este proyecto solista apela al minimalismo, lo vintage y lo sofisticado del sonido envolvente, haciendo de su registro uno fresco y clásico al mismo tiempo. Así parece en su más reciente elepé, Friends, de ocho tracks que surgen de las emociones y sentimientos tan personales de su autor, que evocan veranos que han ocurrido, lugares que ha visitado en su niñez, su juventud, y las personas que lo han marcado en su vida.
Es un trabajo que no solo es escucha, también se siente. Sus acordes y texturas nos llevan a recorrer memorias perdidas desde una habitación, mientras la nostalgia y la desolación se funden con luz.
