Sad Madona encuentre frenesí en sus sintetizadores y las percusiones minimalistas desde lo más recóndito de las sombras que le rodean, ensamblando electrónicamente su nueva rola llamada "913".
Si, es algo un poco diferente -y más estridente- de lo que este lóbrego proyecto parisino nos ha demostrado con anterioridad, pero tampoco nos sorprende: esos ecos digitales y sintéticos alterados ya los habíamos escuchado entre la penumbra de sus melodías, solo que ahora traen vibraciones más potentes que nos llevan a danzar hasta el amanecer:
