Hace poco vio la luz Headlights, el nuevo álbum de estudio de Alex G, quien parece está abriendo una nueva faceta en su carrera artística, una más directa y refinada en su sonido.
Este es el resultado de más de una década de búsqueda artística para concretar un proyecto sonoro que se ajustara a las propias expectativas del músico y cantautor estadounidense. Se vale de una gama amplia de instrumentos, lo que genera como consecuencia natural una fusión rica de diversos géneros musicales, lejos de clichés y con verdades líricas poderosas.
Sus rolas son un poco extrañas pero bellas, accesbibles, por más paradójico que esto parezca. Es equilibrio, vaya. Su habilidad para provocar emociones con sus distintos matices vocales y esta fusión instrumental alternativa es algo inusual. Por eso creemos que es una obra que recompensa su espera y, sobre todo, sus repetidas reproducciones.