Glasszone se sigue inspirando en la coldwave y la darkwave para engendrar música desde un estudio casero, eso lo podemos concebir en su más reciente sencillo y su lado B, "To Leave Behind" y "Autumn Waltz".
Una voz sepulcral debilitada que canta con dolor a la distancia, atrás de los humos nocturnos, mientras la instrumentación se escucha más cercana, asechando las emociones que se contienen por la melancolía que invade el lugar.
¿Le damos play?