Björk se ha hecho escuchar. Acaba de lanzar unas balas contra Spotify, al asegurar que la plataforma de streaming es «lo peor que le ha pasado a los músicos». Ni más ni menos.
Esto ocurrió en una reciente entrevista de la cantautora islandesa en Dagens Nyheter. En ella externó que la rutina de ofrecer shows en directo se va reduciendo cada vez más como una opción creativa, para convertirse en una necesidad económica dado a la cultura del streaming, lo que complica a que muchos músicos lleguen cómodos a fin de mes.
Ella reconoce que cuenta hoy en día con el privilegio de ya no depender más de las giras para obtener ingresos, pero confiesa que sigue realizándolas porque es parte de su escencia como músico. Sin embargo, piensa en todos los artistas más jóvenes que sí dependen de ello, ya que plataformas de streaming como Spotify pagan muy poco por las reproducciones de su música y, además, han incentivado que los fans se compren los discos con menos frecuencia.
En ese sentido, Spotify es probablemente lo peor que les ha pasado a los músicos. La cultura del streaming cambió toda una sociedad y a toda una generación de artistas.
A estas declaraciones se suma una controversia reciente más contra Spotify, por la investigación de la periodista Liz Pelly en torno al uso inmoral de los PFC y Ghosts artists por parte de la plataforma, afectando a muchos músicos independientes. Puedes leer el reporte más detalladamente en este enlace.
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