Tara Busch está de regreso. I Speak Machine entrega una nueva colosal e industrial producción discográfica con la cual varias máquinas, ciborgs y humanos van a vibrar al unísono de sus consistentes timbres. Se trata de War; una colección de 12 rolas en las que también participó su colaborador Maf Lewis, productor y director visual.

Un salto temerario del rock a la electrónica de sintetizadores y fábricas sonoras el que da Busch; y todo por la necesidad de sonar más estridente en un manifiesto político. Esa es la principal razón, también, por la que su voz sobresale siempre a pesar de la potente sonoridad del álbum; sus cuerdas vocales son el instrumento más fuerte en esta conjugación de elementos (Korg MS-20 incluido). 

Ciertamente la obra no llega a ser tan espeluznante como para mantener nuestras emociones y sentidos bien abiertos para no ser sorprendidos hostilmente, pero sí tiene su cierto grado siniestro en algunos capítulos específicos.

Kendra Frost («Santa Monica», «Push the Grease») también tiene su destacada contribución aquí. En una secuencia análoga se mete con Tara a un mundo de ciencia ficción, casi tan fatídico como nuestro mundo real. Y esa es la trama conceptual del álbum, decíamos, mirar la destrucción y la inmoralidad progresiva que se sienta en la arrogancia y debilidad de nuestras comunidades humanas. Escuchar este trabajo en su totalidad es una experiencia tan divertida como severa, sin lugar a dudas. 

Escuchemos «Corruption for the Insidious», el nuevo y espectral álbum de Death Loves Veronica


HISTORIAS DE CULTO