Influenciada claramente por Depeche Mode y Erasure, la nueva banda sensación del synthpop, Cold Connection ha firmado un elegante y ensoñador disco que bien podría estar registrando un hito remarcable en cuanto a debuts de un artista se refiere en esta vertiente musical. Su título es Seconds of Solictude. Y lo recibimos con bombos y platillos.
Tiene un tracklsit de nueve capítulos. Cada rola es una historia distinta que contar, en cada ocasión una atmósfera propia toma la fuerza necesaria para envolvernos en estos sueños lúcidos y sintéticos con ritmos cautivantes. Daniel Billqvist y Pontus Olsson convierten a los ochentas en sus manantiales de inspiración pero añaden elementos de frescura a su sonido, de tal manera que el resultado es un constante tributo al ayer con los pies bien firmes en el hoy.
A pesar de haberse fundado hace más de 10 años, este grupo sueco se tomó las cosas con calma, a la segura y engendraron en este 2021 un satisfactorio y complejo álbum en toda la extensión de su palabra. Dato curioso es que la caratula fue pintada por el hijo de Daniel (mientras que otras ilustraciones del bootleg fueron obra del propio Daniel). Y es que esta música suena así, precisamente: familiar, como un sonido ya bien perpetuado en nuestra mente pero en una nueva presentación, con aditivos distintivos que hacen de su encanto un garfio muy llamativo para someternos sutilmente en la propia cosmovisión del synthpop de Cold Connection.
Escuchemos «They Can Always Hurt You More», el primer LP de The True Faith en un año redondo
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