Deftones vueleven a sonar con fuerza en private music, su nueva placa discográfica de larga duración, co-producida con Nick Raskulinecz.
Este décimo elepé de la banda de Sacramento se consolida como un trabajo indestructible, con mucho ímpetu en su instrumentación pero también en sus letras. Aunque no nos llevan por territorios nuevos o desconocidos, Chino Moreno y compañía elevan su estilo y solidican sus canciones de tal manera que están satisfaciendo a los viejos fans y, de paso, atraen a unos nuevos que encuentran algo más atmosférico y ruidosamente catártico en el metal.
Esto es constrol absoluto de emociones e intensidades, de los tiempos, todo en aras de cautivarnos sin necesidad de reinvenciones. Magnífico: