Hace unos días llegó el nuevo disco de Deafheaven y con él la redefinición de una propuesta sonora estalló con una narrativa más desafiante y reflexiva. En Lonely People with Power encontramos, además de colaboraciones Paul Banks (Interpol) y Jae Matthews (Boy Harsher), al grupo norteamericano lanzando dinamitas que detonan en cámara lenta a todo aquél vestigio de terror y opresión en un nuevo mundo que construyen a partir de sus expansivas ráfagas eléctricas. Y se salvará no solo quien pueda, sino también quien sepa encontrar confort y esperanza en el ruido.
La banda vuelve a la pesadez de sus orígenes, recuperando identidad y rescatando sus raíces. Sin embargo, no tenemos acá un refrito o la repetición de fórmulas monótonas, por el contrario, la transformación de su música es parte de su proceso evolutivo y por eso este disco se siente como un paso gigantesco hacia adelante en su carrera. La tensión se vuelve fortaleza, mientras que el choque de luz y oscuridad otorga equilibrio emocional.
Hemos vuelto al borde del abismo para contemplar el más sereno paisaje del caos: