Vamos a adentrarnos en la oscuridad, ¿vale? En las entrañas de una cueva aparantemente vacía, profunda, con el fondo habitado por una bestia indomable que descansa serena, deseando no ser perturbada jamás de sus aposentos. Este animal es the lucky little red house y su refugio se llama wisconsin96, diseñado por acordes que retumba en viento denso y provocan ecos sombríos al interior, exclamando desesperación, angustia y aflicción.
Imaginen a Swans y Boris respirando el mismo aire, a The Birthday Party y And Also the Trees encendiendo una vela en este santuario oscuro y antiguo. La luz de la luna ni siquiera entra al lugar, solo se contempla desde un punto muy distante, un destello diminuto que brilla con cautela en la lejanía. Mientras tanto, transcurren estos 22 tracks (sí, leyeron bien) que conjugan goth y post-rock como no mucho actos musicales lo habían si quiera contemplado en estos días, y que traviesan la carne y el alma de esta bestia que ya ha muerto varias veces.
Esta es toda una experiencia casi ritualista con melodías ominosas que parecen surgir de las entrañas de la tierra, temerosa de despertar lo que nunca antes ha sido despertado. El fuego danza al compás de estos ritmos y sus cenizas se mueven a través de la cimática de estas crudas y apasionantes composiciones. Brutal álbum:
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