Llamarle a un disco de 10 tracks un «EP» es una cosa rarísima, sobre todo en pleno siglo XXI, cuando los artistas suelen reducir mucho el número de pistas en sus producciones. Últimamente ha sido muy normal ver elepés de siete, ocho o nueve rolas como máximo, ¿a poco no? Y el hecho de que Park Praga diga que Union es un extended play llama muchísimo nuestra atención, ya que deberíamos esperar una verdadera odisea para un long play, ¿cierto?
Hablemos ahora de su sonido: shoegaze nato. Ruido y melodía fundidos con nostalgia y una voz ecoica que va y viene con el caos. Recuerden con esto a Astrobrite, Crisis Arm o Fleeting Joys; sueñen con texturas arenosas y un chirriante zumbido que no cesa, que crea por fuera paredes sólidas en las que rebotan estos guitarrazos estáticos.
¿Quieren dar play? Venga, pues:
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