En su más visita a Dallas, Estados Unidos, Morrissey tuvo que terminar su concierto antes de tiempo debido a la invasión del escenario por parte de una docena de fans que intentaban saludar y abrazar a su ídolo.

Esto ocurrió mientras el Moz interpretaba «Everyday is Like Sunday» en el Music Hall at Fair Park. Comenzó con una mujer haciendo el intento, luego dos y tres hombres más mientras el equipo de seguridad pudo contenerlos, sin embargo, a los pocos segundos aparecieron más asistentes subiendo al escenario e impidiendo que el ex The Smiths siguiera cantando.

Distintos videos aficionados del momento circulan por la red y acá te compartimos uno de ellos: