¿Listos para otra odisea entre Steve Kilbey (The Church) y Martin Kennedy? Más vale, porque el proyecto Kilbey Kennedy lanzó este año su nuevo disco de estudio, Premonition K, otro trabajo conceptual y progresivo que nos sumerge en una lluvia de ideas y realidades fascinantes.
A lo largo de sus 13 tracks, este dúo vuelve a humedecer su serie de cuerdas electroacústicas para crear edificaciones sonoras frescas y volátiles, las cuales escalamos con ellos a ritmos semi lentos hasta llegar a momentos álgidos y estelares en los que la conciencia encuentra confort.
Las ideas al azar y fundamentos que conforman esta obra son las siguientes, de acuerdo a la propia descripción de la banda:
Los asociados del olvido adivinando dulcemente, motores de investigación aprendiendo y quemando, la multitud invisible se reúne alrededor, un nombre en una lápida… ah, ¿te suena? Llame a un cabriolé o viaje eléctrico sin conductor, los enterradores nunca se quedarán sin trabajo, aún así, examinamos una fotografía de un espíritu, todos tomados de la mano en la mesa. Algún cómplice manipulando cosas. Bueno, recuerdo al hombre del otro lado del pasillo. En el recuerdo a la luz del gas de la lámpara y la vela vacilantes, escalofrío repentino y chasquido de hueso roto, algo atrapado en la oscura cortina de noviembre, algo que voló hacia un espejo y desapareció, los perros y gatos se estaban volviendo locos. Podía escucharlos incluso bajo el agua. Un rayo azotó desde una tormenta, la huida tempestuosa de otras dos almas, bruja horrible montada por entidad, hombrecitos horribles que excavan en nuestra vida. Cráneo de un pájaro diminuto, una pluma cae de una habitación vacía, Mercurio sale de la elipse, me apresuro a ir a la estación pero no hay trenes a casa. Una última llamada de embarque pero ninguno bajará.
Premonición K para nuestros chicos del frente.
Premonición K para el bebé en la cuna.
Premonición K para las chicas que quedaron atrás.
Premonición K disponible ahora.
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