En los últimos años ha sido muy común escuchar las palabras Nirvana y demanda en la misma oración, pues el grupo de Seattle se ha visto inmerso en conflictos legales, en unos casos de acusado y en otros de acusador, como es el caso del que les hablamos hoy y que parece haber llegado a su fin.
Se trata de la disputa que inició en 2018, cuando los representantes de Nirvana demandaron del diseñador Marc Jacobs por usar el conocido logo de la «cara sonriente» en su colección de ropa, en una línea llamada Bootleg Redux Grunge. Ahora, después de cinco años de alegatos ambas partes han llegado a un acuerdo, mediante un tribunal federal de Los Ángeles.
Aunque no se conocen los detalles, se sabe que la propuesta de la marca Marc Jacobs International fue aceptada por los titulares de los derechos de autor de la agrupación de grunge.
Cabe señalar que ante la demanda original una una contrademanda de Jacobs, alegando que la procedencia de ese diseño es dudosa, por más que Nirvana siempre ha dicho que fue obra del fallecido Kurt Cobain. De hecho, durante el proceso, apareció una tercera persona (Robert Fisher, exdirector de arte de Geffen Records) alegando que él había sido el autor de ese logotipo.
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