Los noventas están aquí, corriendo pero no de prisa, luminosos pero sin encandilarnos la vista, llenos de colores en una paleta ordenada en sus matices. Y es que The Shop Window ha rescatado no solo el sonido sino la esencia más pura y romántica del indie/jangle pop de aquellos días y lo trae a nuestra vida con su tercer y nuevo disco de estudio: Daysdream (vía Jangleshop Records).

Con esta producción de 16 rolas (es un álbum doble, de hecho), los ingleses acudieron a las fórmulas del DIY, con el líder del grupo, Carl Mann haciéndose cargo de los trabajos finales de masterización. En su cabeza, dice, siempre estuvo rondando este sonido con algunas de las melodías que encontramos en este set, y trató de plasmarlos en una obra humana, frágil y honesta, mostrando sus influencias tomadas de grupos como Close Lobsters, The Stone Roses, The Smiths y Ride.

¿Y saben qué es lo mejor de todo? Que acá tenemos el álbum completito, listo para que le den play, queridos y conocedores lectores melómanos:


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