Imaginen meter en una licuadora bocados de grunge, jangle pop, shoegaze y consumirlo todo en un ambiente de aire sofocado, sucio y con el calor haciendo hervir las venas de tu interior. Algo más o menos así (pero más bonito) es lo que representa el sonido de Holy Vision, una banda emergente de Estados Unidos, que peca de cruda y melódica.
Su estilo será espectacular si te consideras fan de My Bloody Valenitne, Astrobrite o Animal Ghosts. Por ahí va el asunto. Pero luego hay coqueteos al pop de Stereolab y Masha Qrella, como si de un laboratorio de guitarras y percusiones electrónicas se tratara eso. Y para confundir aun más al tímpano, encontraremos también el pop The Casket Girls o Beach House, muy discretamente escondido entre el ruido. Como ven, es todo un estuche de monerías este grupo.
Nos gusta cómo suenan estas canciones para los momentos bajos, para los cursis, los de decepciones contenidas o bien para recibir el estruendo de los rayos que anuncian las tormentas. Es música para escucharse solo y a un volumen alto, para desgarrar el aire con las uñas y para retorcer la tripa que se muestra inmune a las mariposas que vuelan en las entrañas. Esto es principalmente shoegaze, como pueden notarlo. Es emoción y nostalgia de amor detrás de un caos ordenado… Y a veces no tan ordenado.
– Bandcamp
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