Sí, intermitentes. Sí, montados en una tendencia que no ha dejado de estar en boga. Y sí, de muy bajo perfil siempre. Pero son Human Tetris, nos guste o no, una de las bandas de la nueva ola del post-punk más importantes del nuevo milenio, con un arte que se entiende como gourmet: de a poco, de refinada composición y no digerible para todos.
Imagínense si los rusos serán irregulares que desde el 2012 a la fecha, apenas han firmado tres álbumes de larga duración, siendo el que nos ocupa hoy, Two Rooms, el más reciente de ellos. Se atraviesan tantos proyectos musicales alternos y planes fuera del arte, que los moscovitas se saben tomar su tiempo entre una grabación y otra, pero al final, la espera bien vale la pena para su leal y masoquista base de fans.
Escuchando este set de siete rolas (sí, apenas siete, son gourmet, pues) podemos entender que la visión sintética al menos en sus percusiones se antepone a aquél estilo más orgánico de sus inicios. Las guitarras reverberadas, casi en un tono jangle también alcanzan un timbre más irreal, teniendo en conjunto piezas mucho más endebles y ligeras, con menos peso específico pero no por eso sin riqueza melódica. Para hacer una especie de analogía, podemos decir que si bien Happy Way in the Maze of Rebirth del 2012 se asemejaban más a Editors, The Smiths o incluso Interpol, ahora con los «dos cuartos» estos señores parecen los hermanos perdidos de Motorama.
Rolas como «Fade», «Horizon», «Silhoutte» y «The Hardest Feeling» son en conjunto canciones frescas y luminosas para días grises e inciertos, con cierto optimismo en el aire de sus ecosistemas, así como intelecto palpable en esos campaneantes requintos eléctricos. La voz frontal suena sepulcral y sobria, lejos de lo tenebroso y más cerca de un sentimiento de aflicción al encanto que crea cada una de sus cadencias.
Por su parte, «Day and Night», aunque similar en sus ritmos, genera otro tipo de emoción mucho menos desbordante, como haciendo de la incertidumbre y la desesperanza tópicos que nos orillan a bailar en solitarias pistas. Al final, la corta travesía de esta producción nos lleva pronto a su punto final, «Reminder», otro corte minimalista que pretende tomar el compás de los latidos de nuestros corazones.
Si bien es cierto Two Rooms se siente simple y sin mucha sustancia de por medio, muestra a Human Tetris sintiendo ese fervor por la new wave de siglo XXI y el post-punk revivial en su versión más pop. Eso es bueno para la escena. Les decía al inicio que estos rusos son considerados uno de los pesos pesados en esa vertiente, por más ausentes que estén. El minimalismo se vuelve el mayor protagonista de los elementos que ahora componen sus fórmulas musicales, seguido de sus guitarras blandas y ensoñadoras; algo que ciertamente los amantes de sus primeros trabajos van notar con cierta extrañeza. Tampoco pretendíamos que sonaran igual siempre, ¿verdad?
TRACKLIST:
Fade
Horizon
Silhoutte
The Hardest Feeling
I Follow You
Day and Night
Reminder
Me suena a:
