Después de siete años tenemos álbum largo y de estudio de Daughter, una banda que si bien no goza de una trayectoria tan larga como para considerarla un referente del (dream) pop y el (dream) folk, sí firmó en la pasada década dos discos (más un soundtrack y varios EPs, desde luego) dejaron una huella importante en los seguidores más jóvenes de estas labels. Por eso, el lanzamiento de Stereo Mind Game viene de cierta a forma a llenar un vacío en esta creciente base de fans.
A lo largo de este set de 12 canciones vamos a encontrar un registro un poco más orgánico en el sonido de la banda inglesa; como si de bases más terrenales se impulsara para alcanzar esas cumbres oníricas que la sigue mostrando sofisticada. En cuanto a sus letras, notamos más inclinación en buscar salidas al dolor y la añoranza, como si de empeñarse a salir de estos sentimientos se tratara la misión. De esta manera, canciones como «Be On Your Way» y «Dandelion» se sienten como abrazos cálidos en un lugar abierto con la temperatura en números bajos, con suspiros que reconfortan y miradas de confianza encima nuestro.
Por otro lado, «Neptune», «Junkmail» y «Future Lover» aplican nuevos trucos digitales a las fórmulas de composición; de esta manera parece iniciar una relación interesante de Daughter con la música electrónica, que por ahora no sabemos qué tan lejos pueda llegar o qué tan dependiente pueda ser en el futuro.
En general, la producción suele funcionar como un consuelo oportuno para los que parecen derrumbarse en los momentos bajos. No es ciertamente un salvavidas después de la hecatombe, sino durante ella: es decir, no tiene la fuerza para iluminar un mundo que ya ha sido desvanecido pero sí tiene el potencial de evitar que lleguemos a ese extremo. Rolas como la serena «Isolation» ejemplifican esta premisa, pero luego, ya en el final «To Rage» y «WIsh I Could Cross the Sea» parecen mostrar direcciones nuevas que nos conduzcan a la salvación, a un destino más seguro para todos.
De esta manera, Stereo Mind Game es una obra que te acompaña y eleva para mirar la gran pintura desde vuelos altos fuera de la problemática que te atañe. Daughter no suenan fantásticos ni irreales pero sí te invitan a ampliar tus posibilidades si tan solo te concentras en su mágica y elegante cadencia. Y en cuanto a su desarrollo personal como banda, no diré que esto me parece precisamente una evolución, pero sí un cambio de aire que muestra que hay algo de versatilidad allá detrás, en un baúl de trucos instrumentales que todavía tiene mucho que mostrarnos.
TRACKLIST:
Intro
Be On Your Way
Party
Dandelion
Neptune
Swim Back
Junkmail
Future Lover
(Missed Calls)
Isolation
To Rage
Wish I Could Cross the Sea
Me suena a: