Bailey Miller es una nueva cantautora e instrumentista estadounidense que está debutando con su primer disco de larga duración, intitulado Still Water. De no conocerla ni haber escuchado antes nada de ella, el hecho de llamar una obra de esta manera podría estarnos anunciando un sonido sereno, húmedo y tal vez profundo, ¿no? Y sí, algo o mucho hay de eso.

Esta es una producción refinada de 12 canciones que flotan, no nadan sobre un mar tranquilo bajo un sombrío atardecer. Las sensaciones constantes que se transmiten en cada nota son las de un lugar remoto, solitario, de paz interna después de haber despejado las dudas de algunos demonios bajo las aguas. Es música acústica y por más raro que esto suena, también experimental. Algunos lo definen como «post-trip hop» y «dream-folk», pero nosotros preferimos que ustedes la etiqueten como les plazca. Solo queremos que sueñen despiertos:


HISTORIAS DE CULTO