Formada en 2012, SNEERS es una de ese tipo de bandas que me atraen y respeto tanto porque, sin importar el estilo musical que predominen, vienen a aportarle a su género y a la escena en general, y no solo a colgarse de los logros de otros ni a caminar en sendas ya forjadas con antelación. Si bien es cierto M Greta Blaankart y Leonardo O. Stefenelli cuentan con episodios que nos remembran a otras leyendas del Goth (Swans y Diamanda Galas se me ocurren rápidamente), los alemanes radicando en Italia van patentando un estilo único y especial, sobre todo en ese timbre vocal tan hechicero, tan chamánico y aterradoramente seductor que logra cautivarnos y hacer que nos perdamos inmediatamente en su mística y su aflicción.
En su nueva producción, Tales for Violent Days (un nombre agresivo), los que antes han trabajado de la mano de Craig Dyer (The Underground Youth) y Kristof Hann (Swans) retoman ahora, sutilmente, trucos diversos del krautrock y de la música electrónica en sus baterías, un ruido atmosférico derivado de los experimentos primeros del post-punk, y una teatralidad en sus estructuras que podrían venir del corte más cinemático del post-rock. La fusión al final cuenta con prudentes e inteligentes arreglos acústicos así como descargas eléctricas deliberadas. Y así es como han engendrado nueve intimidantes piezas musicales que saben a suplicio y desolación, y que luego son como alquimia para calmar progresivamente el veneno que carcome las vísceras lentamente.
El track inicial (homónimo) es lo más agitado que escucharán en el álbum. Desde este punto la voz de MG nos sacude de una manera peculiar, es como una bruja vieja que nos conmueve con su tormento como si de una vela luchando por mantenerse encendida se tratara: cada vez más débil y titubeante, pero aguantando. «Ode to the Past» (que título más nostálgico, ¿no?) es más una especie de trip-hop desfigurado con el que parece que Greta y Leonardo nos arrastran a través del fango hasta las entrañas más oscuras de un bosque maldito; tratan de seducir con una melodía aparentemente inocente pero las intenciones que se esconden detrás son un poco más perversas. Luego, «Black Earth Shining» surge como una balada con plegarias para quien esté dispuesto a escuchar y sumergirse con ellas. En este punto, ya adentrados en el hechizo de su penumbra, más que arrastrarnos caminamos en hipnosis por llanuras un tanto inestables, adentrándonos en pantanos en los que la naturaleza alrededor resiste antes de morir.
«Lies for Young Men» es aun más cinemática y la garganta de Blaankart sigue sacrificándose con tal de lograr ser escuchada con sus lamentos. La instrumentación aquí es abisal, más atmosférica que nunca. Y después «As Old As the Gulf War» nos pasa al ruido constante de fondo, armoniosamente brutal, que suena como rugidos calmados de una bestia que vigila el curso de un combate entre monstruos a campo abierto, en el que al final explosiones resuenan para dar por terminada la guerra. «Will I Feel You» conquista con sus delicados arpegios eléctricos y una minimalista percusión que nos coloca en el repertorio más apegado a los estándares del «alternative rock» de la banda, y aun así se queda muy distante de serlo realmente.
Ya un poco más adelante, en la penúltima posición de un tracklist que ha removido cosas torcidas en nuestro interior, suena «About Defeats Desires & Demons» que es como una mezcla perfecta -sentimental e instrumentalmente hablando- de Diamanda Galas con Nick Cave; como un clamor de ambos con Rozz Williams detrás para reconfortarnos en esa escena de pesadumbre.
Y es que en lo que respecta a su lírica y la fuerza emocional que se percibe en el clima, este es un disco que parece suplicar por un consuelo, por un algo que llene el vacío interno que pretende ocupar el remordimiento y la intranquilidad. Son nueve oraciones de un cuerpo cada vez más cansado y en sus últimos suspiros, tratando de retomar vigor a partir de rituales vudús bajo la luz de la luna llena.
SNEERS ha firmado en Tales for Violent Days un álbum descomunal que le da nuevas dimensiones a la expresión underground en la música; que le otorga un nuevo sentido al Goth en pleno siglo XXI. Podemos no digerir del todo, o no estar acostumbrados al estilo de canto nigromante de MG pero las innovaciones no siempre son sencillas de aceptar al inicio. Algo aquí me recuerda a Elizabeth Fraser, porque seguramente cuando Cocteau Twins salió a la luz y el mundo los escuchó por primera vez, esa voz -que entonces simulaba a un ave- desconcertaba un poco (o mucho) a los oyentes. Ocurre de manera similar con estos ecos de dolor acá.
TRACKLIST:
Tales for Violent Days
Ode to the Past
Black Earth Shining
Lies for Young Men
As Old as the Gulf War
Will I Feel You
A Fate Worse than Death
About Defeats Desires & Demons
One Day
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