No hay nada como escuchar a un músico en su zona, en su punto caliente desenvolviéndose en los géneros que mejor sabe manejar y, de paso, sin caer en la repetición ni la homogeneidad. Esto es lo que nos revela Flicker, el nuevo disco solista del buen Andy Bell (Ride, Oasis).

Seamos honestos: The View from Halfway Down no fue lo que los fans esperábamos; fue una obra flojita (algunos dirán incluso que malita), pero eso ya quedó atrás. Ahora estamos frente al psych-pop de colores shoegazers y cortes nostálgicos de un compositor que se siente más maduro pero al mismo tiempo más reinventado que nunca; fresco y evolucionando. Es un siguiente paso en la senda del fuzz-pop (y algo de britpop y folk también) que el británico está dando, con un eco ligero y sedoso a pesar del ruido sutil que lo acompaña a su alrededor. Se coloca en la vanguardia con la ayuda en producción e instrumentación de Gem Archer (quien fue su compañero en Beady Eye) y Heba Kadry, con quienes ha engendrado este (¿doble?) álbum de nada menos que 18 tracks:

 

 

 

[PLAYLIST] Enamorados en los 90s