Dejen de hacer todo lo que estaban haciendo. Agárrense fuerte de su silla. Suban el volumen a su reproductor lo más que puedan y déjense extasiar por Veik, la hipnótica y monocromática banda nueva en escena que los hará vibrar de una manera especial. El primer LP de su historia ya está aquí: Surrounding Structures.
El grupo francés no trata de agradarte a ti ni a nadie a primera escucha. Su música puede ser difícil pero adictiva en las sendas del post-punk psicodélico y el krautrock electrónico, minimalista. O algo en medio de esos dos. O algo que quizá no se había escuchado con frecuencia antes. O algo que pudiera surgir de una noche de humos y alcoholes entre Iceage y The Soft Moon. Quizá Suuns observando de lejos. Sus sintetizadores análogos, una inquieta caja de beats y las texturas múltiples de sus guitarras rasposas hacen juego con esa garganta media borracha y sofocada delante, acompañada de coros andróginos y esporádicos, conjugándose todo en elementos dispares muy bien cohesionados en un tracklist de 10 rolas que nos conducen a la insensibilidad, a un sueño extraño donde la confusión y la armonía se abrazan.
Imaginen este disco como un ritual, mejor dicho como una terapia para tratar de canalizar la energía desbordada al interior. Un ejercicio para aprender a controlar la neurosis y la paranoia que juega con las mentes de tres músicos que buscan trascender en esta sintética oscuridad. El cuarto en el que están encerrados emanando sus ondas sonoras dibujan sombras de paisajes irreales y siniestros que sacuden la imaginación. A algunos les hará sentir confort, a otros los incomodará hasta caer en el horror. ¿Qué tipo de oyente serás tú en esta experiencia?
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