Las letras de Mikel Erentxun (como solista) son postales de pasiones, despedidas y recuerdos que se niegan a desvanecerse con el tiempo. Entre la herida y el deseo, el músico venezolano-español ha capturado la fragilidad humana en cada verso, recordándonos que el amor y la soledad muchas veces llegan juntas de la mano. Vamos a dar un paseo por algunas de las líneas imborrables, como cicatrices que duelen pero también reconfortan:
1.- Este hotel de montaña con un piano desafinado existe sólo para mí. No me cuesta convencerme de que esta soledad es mi única amante.
Puedo Dormir de un Tirón Más de Una Vida/ Acróbatas LP/ 1998
2.- Hoy vuelvo a deshojar ¿me quiere o no? Más flores al azar porque así soy feliz.
El Cielo es del Color de las Hormigas/ El Abrazo del Erizo LP/ 1995
3.- Miénteme sin condición, sin odio dentro. Miénteme que no hay amor sin dolor.
Miénteme/ Naufragios LP/ 1992
4.- No todos los caminos se hacen al andar. No todos los fuegos dan calor. No todas las miradas logran hablar sin palabras. Tarde o temprano lo sabrás.
La Orilla de Carla/ Te Dejas Ver LP/ 2000
5.- Amor feroz, amor pirata cada mañana al despertar. Me gusta verte cabalgar olas de furia y fragilidad.
Gigante/ El Último Vuelo del Hombre Bala LP/ 2019
6.- Hay dentelladas del calibre 10 en tu piel. Guardas caricias para mí con tu filo peor.
Uña y Carne/ Naufragios LP/ 1992
7.- He llamado al ascensor para poder descender al filo de otra edad: hasta el diez, hasta el seis, hasta el quinto año. A la pista escolar, a mi amor en un blog… Donde no había máscaras ni ganas de mentir.
De Espaldas A Mí/ El Abrazo del Erizo LP/ 1995
