Mark Lanegan lanzó hace poco su nuevo disco de estudio, Straight Songs of Sorrow, un título fuerte para un contenido lírico y emocional correspondiente, con instrumentación o textura quizá un poco más frágil (a propósito).

 

 

El veterano cantautor norteamericano se escucha en comunión con la música electrónica en esta etapa experimental que emprende. Es verdad que no es la primera vez que le escuchamos así, pues en sus anteriores y más inmediatos trabajos ya había incursionado con éxito en esta senda sonora, sin embargo en este LP lo hace constantemente, valiéndose de ello para la construcción de todo su tracklist. Es como si el periodo de prueba-error-acierto haya quedado atrás y por primera vez vemos el resultado final tanto ensayo, la cual ha valido la pena y espera.

 

 

(puedes escuchar el álbum aquí, vía YouTube, dando siguiente a todos los tracks)

https://www.youtube.com/playlist?list=PLHw_vepq8vWORe096DJ5QFcRtJCP-2RxQ

 

La honestidad en las letras de Lanegan es casi viceral, brutal, lo cual nos deja expuesto a un artista que se siente cómodo en abrirse, tomando su fortaleza de ello. Energía mediante el dolor. Quien haya leído su llibro I Am The Wolf entenderá aun más el camino a las reflexiones existenciales y filosóficas de Mark en su vida. Esta es una producción íntima, intensa, oscura y lacerante que, desde muchas perspectivas, se disfrutará y parecerá adictivo en las repetidas reproducciones.

 

 

 

 

Repasemos «Earth», el primer álbum como solista de EOB (Ed O’Brien de Radiohead)