1. Random Avenger – Magyar Posse
¡Sálvese quien pueda! El soundtrack perfecto para correr por tu vida. Difícilmente van a encontrar en el post-rock (y géneros afines) una propuesta tan espeluznante como la de estos finlandeses en este álbum en particular: cinemático en los tonos más infernales para llevar tu adrenalina a otros límites. No es un disco apto para cobardes, es por el contrario una odisea súbita en la que se reta a los oídos más intrépidos mientras buscas cómo mantenerte a salvo.
2. Broken – Nine Inch Nails
Como para subirle dos (o veinte) rayitas al caos en medio de una crisis. Que se rompa todo de la salvaje mano de Trent Reznor que nos dejó una de sus obras más incendiarias y con la que podemos tener pensamientos anárquicos en bases sonoras industriales y súper eléctricas. Si estamos cerca del final, que arda el fuego entonces.
3. All is Violent, All is Bright – God is an Astronaut
Este álbum está hecho a partir de una rica mezcla de emociones que propone en la imaginación nuestras últimas horas en el planeta desde diversas perspectivas. Entra tantas preferimos la más cósmica, esa que ayudará a trascender después del deceso para dar inicio a algo nuevo. El proceso puede llegar a ser doloroso y melodramático, pero lleno de reflexiones y una energía espiritual que nos motiva a seguir adelante.
4. Stargazer – Stella Luna
Ah, pero si hablamos del cosmos entonces demos paso a este soberbio EP (que podría pasar por LP) que nos va a llevar a rincones insospechados allá arriba. Nunca antes las lluvias de estrellas y los choques entre cometas se habían vislumbrando con un shoegaze de este estilo entumeciendo los sentidos. De repente parece que la actividad eléctrica de los átomos del universo tiene melodía en medio de un fragor que te eleva lentamente y cada vez más lejos. Un disco estupefaciente para aquellos que no le temen a la oscuridad ni a lo desconocido.
5. Dead Cities – The Future Sound of London
Si al escucharlo no pierdes la cabeza entonces te dará vigor y confort entre la angustia y la incertidumbre. Dead Cities es un poderoso disco que siempre sonará futurista, así que estarás un paso adelante de la catástrofe. Quizás por eso es perfecto para un Apocalipsis: otorga confianza en medio de la locura.
6. Concreté Misery – Sevendeaths
La obra de Steven Shade es el resultado de noches de insomnio precedidas de un poco de angustia y desesperación. Sus líneas electrónicas le dan un nuevo sentido a la música experimental: uno más espectral y enigmático. Este puede ser un álbum que ayude a descifrar algunos misterios en la oscuridad mientras la incertidumbre se apodera del momento.
7. Pain is Beauty – Chelsea Wolfe
La nueva reina del darkwave te conduce poco a poco adentro de un valle en la penumbra donde, una vez dentro, no habrá salida si no es a través de la confrontación de los miedos. Es un álbum con dolorosamente hermosas odas al amor y la destrucción, con catarsis emocionales mediante brutal poesía gótica y una sensación constante de estar cómodamente inmerso en el sufrimiento. Es una melodramática obra que va creciendo a su ritmo en busca de una purificación no solo emocional sino también espiritual que reconforta incluso cuando crees que el final está cerca.
8. Just for a Day – Slowdive
Para los ávidos por encontrar sutiles destellos de luz en la opacidad del desánimo. Ciertamente Slowdive no pintará una sonrisa en tu rostro pero sí logrará como pocas bandas que sientas a flor de piel el momento más catártico de tu vida, si fuera necesario. La desesperanza tiene eco y se moja en reverb en este majestuoso álbum; también el amor.
9. The Unnatural World – Have a Nice Life
Un álbum brutal para dar tiros de gracia emocionales en esos días en los que has perdido la fe en la humanidad. Con evocaciones a los oscuros episodios de las persecuciones religiosas, asesinatos famosos, brujería y la subcultura gótica con sus más afligidos atributos, esta banda se posa en climas fríos para asfixiarte en una agonía existencial que somete lo suficiente para que, irónicamente, se disfrute como si se tratara de las últimas notas que escucharás en tu vida.
10. Lost Themes – John Carpenter
Una aventura sonora que conduce hacia lo desconocido y paranormal de las noches. Las secuencias digitales de Carpenter parecen evocar espíritus de otros planos para que nos acompañen en los momentos más temerosos que vamos a experimentar, al ritmo de ese electro-dark blues que envicia y somete.
11. Happy Songs for Happy People – Mogwai
No se dejen engañar por el título, bueno, a menos que estén felices cuando las catástrofes ocurren. Mogwai le pone vibra y conmoción a cada tema en este álbum a su propia manera, en su fiel estilo post-rocker experimental en donde el ruido y un calificado sentido de melodía conviven en perfecta armonía.
12. Ghost Riders – Suicide
Como para pintarle el dedo al Apocalipsis; para tomarse unos vinos entre la humadera de las pipas en espera de recibir con singular indolencia al fin del mundo. Si todo va a estallar y estamos ante nuestros últimos instantes, pues que nos ensordezca Suicide mientras las bocinas rechinan de tanto chasquido y estridencia eléctrica.
13. A Day in the Stark Corner – Lycia
Como si ángeles de un cielo oscuro bajaran a ponerle música a la hecatombe; y sentimientos de fatalismo y desaliento se respiran en esta excelsa atmósfera gótico-fantasmal. Si se tratara también de ángeles devenidos del inframundo, la invitación a ir con ellos podría seducir al escucha entre notas que aletargan los sentidos y brindan cierto sosiego ante la incertidumbre.
+1
( ) – Sigur Rós
Si pudiéramos imaginar el fin del mundo como una película en la que se cuentan desde un inicio de la historia los diversos episodios que al final darán pie al desastre con el que todo estalla, es decir, si comenzamos desde la calma hasta la tempestad, entonces ( ) es el mejor score que vamos a encontrar. No diremos más que: si quieres irte preparando progresivamente para despedirte con elegancia de este mundo, entonces estás en el lugar correcto.
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