Aunque Colombia tiene una escena prolífica, no es tan frecuente encontrar agrupaciones ligadas al shoegaze o el dream pop. Hay excepciones reseñadas anteriormente como Petite Monster pero igualmente son situaciones muy excepcionales.
Seguramente por eso nos llamó tanto la atención Mala Bengala, un cuarteto radicado en Bogotá que impacta de lleno gracias a letras repletas de mística, como si buscaran transmitir un punto de vista épico a distintas situaciones de la vida. De igual manera, cabe destacar el registro apasionado de su vocalista Daniel Montes, no muy alejado del de Gustavo Cerati o Philip Oakey de The Human League.
Instrumentalmente son un híbrido muy particular entre las bases sintéticas aportadas por Daniela Loaiza, guitarras que oscilan entre lo etéreo del dream pop y lo abrasivo del shoegaze (a veces dejando colar rasgueos más animados), y un manejo de la melodía soberbio donde se percibe particularmente la influencia de The Cure, sobre todo en las elecciones para crear arpegios.
Su EP Tanta Ficción (Lado A) salió hace algunos meses y en las cuatro canciones que lo conforman saben traducir todas esas características hasta convertirse en un exponente a tomar muy en cuenta a partir de ahora. Se espera un Lado B para los próximos meses (básicamente Tanta Ficción es un debut por partes), pero por lo pronto podemos disfrutar de un grupo que sin muchas pretensiones ofrece momentos muy potentes en su naciente repertorio.
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