En aquellos días en los que Damien Jurado se encontraba promocionando el fin de una trilogía discográfica, con su álbum Visions of Us on the Land (año 2017), se paseó por varios rincones mediáticos para estar promocionando el material, entre los que entabló una charla con el crew de SPIN para hablar de sus planes pero, también, de sus gustos artísticos; y desde luego que se le preguntó por sus álbumes preferidos.

Y la lista quedó así:

 

1.- Mimi & Richard Fariña, Celebrations for a Grey Day (1965)

Dice que es un álbum que recuerda empezó a escuchar cuando estaba la euforia de Nevermind de Nirvana; así que él se refugió en sonidos más acústicos.

 

2. Devendra Banhart, Cripple Crow (2005)

A pesar de reconocer que no está muy actualizado en nuevos lanzamientos de artistas contemporáneos (porque dice que hay mucha música vieja que descubrir aun), siempre ha admirado a Devendra Banhart y en especial este disco: «las primeras dos canciones son increíbles».

 

3. MIJ, Yodeling Astrologer (1969)

Admira a MIJ (cuyo nombre real es Jim) por la historia de este disco. Dice que Jim tocaba la guitarra en la calle, en un parque y un productor lo escuchó y lo invitó a grabar un álbum, Yodeling Astrologer que salió en una hora.

 

4. Dead Can Dance, Spleen and Ideal (1985)

No sabe por qué los jóvenes góticos amaban tanto este disco ya que no había nada vampiresco ni «macabro» en la banda; pero siempre amó a DCD porque su música era cinemática, especialmente en este álbum el cual está fuera de cualquier comparación.

 

5. Jim Sullivan, U.F.O. (1969)

Dice que la historia de Jim desapareciendo en el desierto es fascinante, ya que le recuerda mucho a su disco Maraqopa que es sobre un artista que desaparece y jamás regresa.

 

6. The Sound, From the Lions Mouth (1981)

Su sonido le recuerda a bandas post-punk como Wire y Joy Division. Dice que escuchó a The Sound a los 13 años en la radio, en Seattle, y que con dinero que le dieron sus padres fue a comprar el disco inmediatamente.

 

7. Kraftwerk, Radio-Activity (1975)

Aunque no lo crean, era el año 2002 y Damien Jurado no conocía a Kraftwerk. Confiesa que fue en una gira en ese año que su amigo Jason Molina puso este disco mientras recorrían las carreteras en su automóvil.

 

Puedes leer la entrevista completa (en inglés) AQUÍ